Recientemente la filial británica de la consultora BDO ha publicado una encuesta sobre la importancia de los criterios ESG en los fondos de Private Equity, así como las acciones que han realizado para adaptarse a esta nueva corriente.

Las buenas noticias son que en el sector de Private Equity del Reino Unido ha calado de forma relevante la importancia de los factores ESG a la hora de invertir en las compañías participadas, poniéndolo de manifiesto un 63% de las gestoras de capital riesgo.

Fuente: BDO

 

Por el contrario, las malas noticias son que sólo un 25%-30% han establecido medidas que puedan tener un impacto real, como podrían ser contar al menos, con una persona especializada en ESG en la gestora, no sólo para el momento de invertir en nuevas compañías, sino también para crear valor en sus participadas, o fomentar la firma de un código o política ESG de acceso público que comprometa a la gestora.

Vemos nuevamente como nos queda un largo camino por recorrer. No se trata sólo de declarar la importancia de los factores sociales y medioambientales de cara a la toma de decisiones de inversión, o de realizar actos cosméticos (greenwashing), sino que hay que poner los medios y el rigor necesario para poder crear valor reduciendo los riesgos sistémicos que entabla el cuidado al medioambiente mejorando las relaciones  con los diferentes stakeholders y las políticas de Gobierno Corporativo para hacerlo robusto y con la transparencia y seguridad requerida por los inversores.

Mago Equity cree en lo fundamental de generar un impacto positivo medioambiental en nuestras participadas, poniendo atención en el cuidado de los empleados y las comunidades donde operamos, buscando establecer sistemas de medición para el impacto generado. Todos estos compromisos nos ayudan a mejorar y nos permiten establecer objetivos ambiciosos para crear valor, tanto a nuestros inversores, como en el desarrollo del sector de capital riesgo.